Friday, December 20, 2013

Mal Sabor

Ella me invitó un martes a un viejo café, el día lo tenía desocupado y accedí, hace poco la conocí y no me importaría llegar a conocerla más. Al llegar, ella se pidió un capuccino, yo una taza de café colombiano.
El lugar estaba ambientado por Bob Dylan, aquel martes sólo estábamos ella y yo. Y antes de haberle hecho una de esas preguntas que se realizan y se responden automáticamente, por ejemplo: "¿Cómo estás?", "¿Qué tal el día?" "¿Qué tal Bob Dylan?". Antes de que ella o yo hubiésemos disparado cualquiera de esas preguntas automáticas me dijo:
—Y por el amor nadie se preocupa.
—¿A qué te refieres? —Me agradó que nuestra conversación no hubiera iniciado de manera rutinaria.
—Nos preocupamos por nuestros peinados —me dijo—, si nuestro desempeño sexual es satisfactorio, por el sabor de nuestra boca después de una bebida. Pero del amor nadie se preocupa, del amor no hay que preocuparse.
—Hay algunos que si nos preocupamos.
—No. —respondió en seco— Se preocupan por el hecho de que les bailen y luego les cacheteen. Por el amor nadie se preocupa. —rectificó.

Su manifiesto me puso a pensar, al pasar el trago de café caliente por mi garganta 
sentí repulsión, por alguna razón no me supo bien, simplemente desagradable, y por cortesía, lo deje a un lado el resto del momento. Me quedé hundido en la idea de cómo es que se conocen las personas y en lo surreal de cómo es que las vidas que en algún momento fueron paralelas empiezan a unirse. A todo esto seguía sin resolver algo, así que me atrevo a preguntar:

—¿Y porqué por el amor nadie se preocupa?
—Cuando amas —alzó su voz y no le importó que resonara el eco en el viejo café solitario—, te vale todo: —Con sus dedos indica las cosas que menciona— Sufres, te vale; lloras, te vale; haces el amor, te vale. Te das a descubrir completamente a cambio de descubrir al otro, te dejas completamente vulnerable y te vale.
        Exhaló ferozmente y continúa su argumento, manteniendo la voz firme.
—Y desde que una persona me preguntó porqué buscamos amar, yo he pensado en cómo es posible liberar dopamina con un simple beso, de cómo es posible despertar al día siguiente con una sonrisota basada en un recuerdo, de lo perfecto que pueden llegar a ser dos cuerpos unidos en una pieza musical, de el espacio y tiempo que se crea en una mirada sumergida en los ojos del otro. Y esa misma persona me preguntó "¿Porqué buscamos no amar?", ese aspecto aun lo estoy analizando, soy más del lado romántico —dobló su mirada hacia su lado derecho, bajó su voz e inició a observar la taza de capuccino, le da un sorbo.

No notamos que enseguida de nosotros un mesero moreno y velludo, con cabello gris estaba limpiando la mesa de al lado y que nos echaba una mirada de despecho, chistó, y pronunció su respuesta a mi acompañante:
Cállense mocosos, cuándo salen las lonjas lo romántico se acaba, los orgasmos nunca se comparten y por más que sientas que el tiempo que pasan juntos es perfecto y valioso. el olvido desciende como guillotina y nos da una lección; no se pregunten nada de eso. Ustedes sostengan el sueño porque la neta no dura ni madres. —Termino de preparar la mesa y se retiro con los residuos que dejaron los clientes anteriores.         La señorita frente a mí actuó contradictoria a lo que dijo el mesero, se podría decir que se sintió ofendida; y noto porqué, le están dando una respuesta a una pregunta que prefirió evitar.

La contempl
é tomar su capuccino mientras sostenía su reacción agraviada... Yo también sé la respuesta de aquella pregunta, preferí no contársela y evitar discusiones.
     Buscamos no amar por una razón parecida a la buscamos amar: Por que quedamos vulnerables. Algunos de nosotros somos demasiado miedosos y/o cabrones como para embarcarse en una ilusión,  no queremos pasar un día con los ojos rojos (no por marihuana, por favor seas idiota) y tener que ocultarlos.
    A veces no aprueban y ni tú apruebas tu forma de amar, ya seas un raro, un cursi o un ninfómano. Y aparte de vulnerables, necios; necios de permanecer en la vida del otro. Un claro ejemplo podría ser: "Persona A ama a persona B. B tiene muchos planes para su vida, pero A no pertenece a ellos."
      Buscamos no amar por lo incapaces que somos de decir que hacemos feliz a alguien.
Amar es suicidio, y te pueden revivir, o dejar morir.

Permancí en el viejo café, acompañándola por un rato para escucharla. Mi taza asquerosa 
seguía intacta.